Javier Carballeda, Gerente de la Asociación de Constructores de Pontevedra
La Asociación de Constructores de Pontevedra (ACP) aglutina a más de medio centenar de empresas que emplean a más de 2000 trabajadores y tienen una facturación conjunta que ronda los 750 millones de euros. El sector se ha consolidado como uno de los motores de la economía durante la pandemia con niveles altos de actividad y de creación de empleo.
¿Cómo se está comportando 2021?
Afortunadamente no hemos sido de los sectores más castigados por la pandemia y el sector se esta comportando razonablemente bien, con unos índices de actividad bastante elevados.
¿Y en Vigo? Porque ha resurgido la construcción de viviendas pese a no haber un Plan General.
En Vigo se eta viendo bastante actividad en cuanto a nuevas promociones. A pesar de la anulación del Plan General en 2015 creemos que la aprobación del instrumento de ordenación Provisional se ha convertido en una herramienta muy útil y beneficiosa para poder construir.
En los últimos años la construcción de vivienda nueva en la ciudad había sido testimonial. Sin embargo, desde los últimos tres años estamos asistiendo a un resurgir de la obra nueva y la rehabilitación de muchos edificios y parece que es una dinámica que se está consolidando.
¿Se ha mantenido el empleo?
Si. El sector de la construcción, descontando el sector primario, es el que mejor se ha comportado. Atendiendo a los datos de la EPA, a nivel estatal tuvo un comportamiento mejor que otros sectores y en Galicia incluso mejor que en el conjunto nacional.
¿Necesitan trabajadores? ¿Qué perfiles son los más demandados?
Si, es un problema que se esta agudizando en estos últimos años. Por desgracia es un sector muy envejecido y en el que se hace necesario un relevo generacional. Se necesitan muchos perfiles profesionales como encofradores, albañiles, jefes de obra, instaladores o pintores. Prácticamente personas de todos los oficios.
¿Cómo es la presencia de la mujer en este sector?
En puestos directivos y en administración, así como en perfiles técnicos (arquitectas, ingenieras, coordinación de seguridad y salud) cada vez es más frecuente. Pero en las obras la verdad es que es muy difícil de encontrar alguna mujer trabajando. Es un sector, en este sentido, donde la presencia femenina es muy escasa.
¿Qué se esta comportando mejor, la obra pública o la privada?
2020 no ha sido malo para Galicia desde el punto de vista de la obra pública. Hubo un incremento del importe de la obra publica licitada de un 8,47% con respecto a 2019 y en la provincia de Pontevedra el incremento ha sido del 12,5%. Confiamos en que las Administraciones sigan apostando por la obra pública durante este año. En cuanto a la obra privada, la perspectiva es que 2021 no sea peor que el año pasado.
¿Y las reformas? Porque cuesta contratar carpinteros o electricistas, entre otros.
Las reformas de viviendas han experimentado un pequeño boom durante el último año. Creemos que la situación de a la pandemia, el cierre que sufrió la hostelería y el confinamiento propiciaron que mucha gente apreciase el valor de sus viviendas, lo que motivo que muchas de ellas se reformasen. AL pasar mas tiempo en casa y no poder salir ni viajar, provoco que muchos invirtiesen el dinero que no podían gastar en ese ocio y turismo en reformar sus domicilios y adaptarlos a las nuevas necesidades creadas. Realmente cada vez cuesta mas encontrar a ese tipo de profesionales como carpinteros o electricistas.
¿Qué papel tiene el sector de la construcción en a la recuperación económica?
A diferencia de otras crisis donde la construcción fue el problema, como la del 2008, ahora puede ser parte de la solución debido al carácter tractor y multiplicador que tiene sobre otros sectores económicos. Creemos que podemos ser un sector refugio para todas aquellas actividades que por desgracia lo están pasando mal, con capacidad de poder absorber esos puestos de trabajo que se están destruyendo.
¿A qué aspiran con los fondos europeos?
A que se administren de la mejor manera posible y a que puedan relanzar el tejido productivo y empresarial del país. Existe la previsión en el plan que ha diseñado el Gobierno de importantes partidas para destinarse a la rehabilitación de viviendas el ciclo del agua y la eficiencia energética. Consideramos que pueden ser tres palancas muy importantes para crear empleo y riqueza.
¿Qué es lo peor de esta crisis para la construcción?
La incertidumbre que ha generado la pandemia tanto a nivel personal como empresarial. En una economía globalizada como la que tenemos, a fin de cuentas, todos los sectores productivos estamos de una u otra manera conectados. Y al llevar ya un año en esta situación, el desgaste es grande. Pero nos consideramos afortunados de poder contribuir en la medida de los posible a la recuperación económica y de empleo.
@atlanticodiario