Constructores e inmobiliarios acogen con optimismo la ordenación provisional de 23 millones de metros, en los que se podrá construir. El sector considera que la medida del Concello crea seguridad jurídica y relanza la economía y el empleo.
La aprobación de la ordenación urbanística provisional en el pleno del miércoles, que desbloquea 23 millones de metros cuadrados del urbanismo vigués en los que se podrá solicitar licencia para obras, ha provocado un suspiro de alivio en el sector de la construcción, promoción e inmobiliario de la ciudad y también de Galicia, por el efecto que tendrá toda esta actividad económica.
En este sentido el gerente de la Asociación de Constructores de Pontevedra, Xabier Carballeda, subrayó que supondrá “que se reactivará la economía de la ciudad, porque la construcción crea muchos empleos indirectos, porque no es solo lo que hagan las empresas de construcción, sino también la industria auxiliar”.
Carballeda lo calificó como “un paso muy positivo” porque “parece que todas las administraciones, Xunta y Ayuntamiento, reman en la misma dirección y va a ser un alivio para la construcción después de años tan duros”, señaló.
Por otro lado, el presidente de la asociación de promotores Aproin, Javier Garrido, también hace “una valoración muy positiva” porque “el inicio de la tramitación permitirá que una parte del suelo municipal adquiera seguridad jurídica”, enfatizó.
Garrido recordó que todo empezó “con la ley de acompañamiento de los presupuestos de la Xunta, que generó este ordenamiento provisional y da esta posibilidad para los ayuntamientos con el planeamiento suspendido”.
En este sentido precisó que “la escasez y falta de oferta sube los precios como en cualquier producto o servicio”. Javier Garrido aseguró que “hay demanda porque hace un montón de años que en Vigo no se hacen viviendas y especialmente de las de segmento medio-bajo, porque no hay suelo y se ha acumulado una demanda insatisfecha que hay que satisfacer”.
Por su parte el presidente de la Federación Gallega de Empresas Inmobiliarias (Fegein), Benito Iglesias, opina que “era muy necesario” porque “la presión en la ciudad sobre la vivienda, tanto en venta como en alquiler, es muy grande”, señaló. Así que lo ve “un balón de oxígeno para más de 300.000 personas” porque “aflorará vivienda nueva y se controlarán los precios”. Iglesias Padrón explicó que “la demanda es brutal y en los últimos meses especialmente». Para concluir con la esperanza de que «la Xunta no pondrá más palos en las ruedas”.
El gobierno de Vigo consiguió el miércoles el apoyo del PP para aprobar, de forma inicial, el Instrumento de Ordenación Provisional. Marea votó en contra.
Esta herramienta permitirá recuperar suelo urbano consolidado y zonas con alto grado de desarrollo en el plan de 2008, que suponen un 24% del municipio, lo que añadido a las zonas que ya se pueden desarrollar, por planes especiales o parciales, alcanza el 38% del término municipal.
El alcalde, Abel Caballero, aseguró hace unos días que «entramos en una nueva etapa en la que va a estar operativa toda la edificabilidad que puede desarrollar esta ciudad en los próximos diez años».
Una vez superada la aprobación inicial se notificará a los 50.000 titulares catastrales que se verán afectados, que ya podrán edificar en sus propiedades. A partir de ahí, el documento será enviado a la Xunta y posteriormente llegará de nuevo al pleno para su aprobación definitiva. Con este mismo procedimiento, el Concello está tramitando el ámbito de Recaré, de suelo terciario, y los ámbitos de Samil. De forma paralela continúa la tramitación del Plan General.
Vigo carece de Plan General después de que en noviembre de 2011 una sentencia del Tribunal Supremo decretase su suspensión al concluir que hubo deficiencias por parte de la Xunta en la tramitación ambiental. En 2021 máximo tendría que estar listo el nuevo PGOM.